Nuestras raíces
De Voces de la Calle a Nuevas Voces: nuestro origen y crecimiento hacia la transformación de la realidad de los niños y niñas de Chile.
2013: El inicio del viaje
En 2013 iniciamos nuestro trayecto con el sueño de transformar la realidad de los niños y niñas de los barrios más vulnerables de Chile a través del arte y la educación.
En aquel momento nos llamábamos Voces de la Calle, nombre de la autoría de nuestra fundadora Cláudia Carracha, de nacionalidad portuguesa, que, con el apoyo de su amigo Andrea Menescardi, de nacionalidad italiana, llevó el proyecto a la población de La Legua, en la comuna de San Joaquín.
Creamos la organización con el propósito de desarrollar al niño o la niña en varias dimensiones, aportando a su inclusión social y a la reducción de las desigualdades sociales. De esta manera, partimos con un proyecto piloto de 16 talleres artísticos y pedagógicos (cine, teatro, derechos humanos, prensa, pintura entre otros) dirigidos a niños entre los 3 y los 18 años con el apoyo del programa Recuperación de Barrios La Legua bajo el Ministerio de la Vivienda y Urbanismo y aún con la colaboración de la Corporación Cultural de San Joaquín.
Su fiesta de inauguración en la población fue un éxito que inició el vínculo de confianza con la comunidad, transformando a Voces de la Calle en una organización funcional legalmente constituida el 30 de abril del 2013.
2013-2020: El viaje en marcha
Voces de la Calle, bajo la misión de ampliar la conciencia de los niños, jóvenes y adultos mediante una perspectiva más global y diversificada de la vida, continuó creciendo en el número de voluntarios, niños, familias, actividades y alcance gracias a sus múltiples talleres de integración sociocomunitaria y actividades culturales.
Tratamos de establecer un equilibrio entre el conjunto de personas y lugares que influyen en la vida del niño, como la familia o la escuela, para contribuir a su bienestar y hábitos saludables dentro de la comunidad. Por ese motivo, los padres, familiares y vecinos eran siempre invitados a colaborar en el proyecto participando en las tareas de los fines de semana, a intercambiar ideas y opiniones, a participar de las reuniones de promoción, a captar nuevos voluntarios y niños y a ser agentes de cambio de la organización y sus respectivos valores.
En nuestros comienzos los talleres teórico-prácticos, cuyos nombres han sido pensados de manera colaborativa entre voluntarios y niños, se impartían por semestre todos los fines de semana, con una duración aproximada de 2 horas cada uno.
Con el paso del tiempo, Voces de la Calle se consolidó reduciendo y centrando su actividad en los talleres más exitosos y demandados, y con actividades fijas durante el año. Existían aún otras actividades para celebrar días festivos, como el Día del Niño o del Padre, la Navidad, actividades de cierre de talleres, de verano y paseos pedagógico-culturales. Por otra parte, los voluntarios nacionales e internacionales iban rotando, algunos de manera más continua y otros puntualmente.
Durante ocho años, Voces de la Calle siguió creciendo y desarrollando sus actividades con el aporte de sus voluntarios, donantes privados y algunos fondos concursables. Cabe destacar el impacto de la pandemia Covid-19 en nuestra organización, que dejó de funcionar en terreno, realizando solamente algunas iniciativas muy puntuales como la entrega de regalos a los niños por Navidad.
2021: El cambio
Sin duda, el año 2021 marcó un punto de inflexión para la organización, que decidió renovarse y reorientar su enfoque.
Con una estructura más simplificada y mixta de voluntarios con formación y experiencia en el área social y de gestión/administración, la organización buscaba un objetivo más concreto y un alcance más amplio.
Bajo el nombre de Nuevas Voces, la organización cambió su personalidad jurídica de Organización Funcional a Corporación con el objetivo de expandir su alcance a otras líneas de financiación y zonas de intervención en las comunas de Santiago y del país. Además, cambió su estratégia comunicacional e imagen corporativa, adoptando un tono más fresco y dinámico.
Pero lo más importante fue el cambio en su misión: centrarse en el desarrollo socioemocional del niño o niña como agente de cambio con la capacidad de transformar su entorno familiar y comunitario (modelo de empoderamiento).
2024: Hoy
Hoy, en Nuevas Voces seguimos con la misma ilusión y compromiso que el primer día.
Con una red de colaboradores y aliados cada vez más amplia y diversa, la organización trabaja en el diseño de talleres, actividades y eventos que buscan potenciar las habilidades, valores y sueños de los niños y niñas que participan en sus programas.
Tomando del pasado la experiencia, el conocimiento, la visión y los aprendizajes, tenemos como meta hacer llegar nuestra oferta educativa a nuevos contextos vulnerables de Chile.
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